Explicación:

Recientemente en la Revista Proceso [5], un “experto” en agricultura biodinámica (Harald Hoven), hace un llamado al gobierno entrante para promover el uso de menos agroquímicos en el campo. Dicha propuesta puede ser considerada como válida, ya que el uso excesivo de agroquímicos de manera irresponsable contribuyen en gran medida a la contaminación de mantos acuíferos y la reducción de la biodiversidad, incluyendo a diversos microorganismos presentes en el suelo, los cuales son esenciales en los procesos de reintegración de materia orgánica y fertilidad de los suelos.

A pesar de lo bien intencionada de la propuesta, Harald Hoven también insta al próximo gobierno a “incursionar en métodos alternativos de producción de alimentos (...) como la biodinámica”. , Esta “alternativa”, sin embargo,se encuentra basada en pseudociencia y  mezcla algunos principios de la “agricultura orgánica” con creencias mágicas y pensamiento esotérico. Por ejemplo, Demeter International es la única organización facultada para emitir certificaciones de agricultura biodinámica, y es el  propietario de la marca biodynamic^[1]. Los principios básicos de las técnicas de biodinámica se basan en supuestos pseudocientíficos, tales como el uso de homeopatía aplicada a la agricultura, los signos del zodiaco, y las “fuerzas cósmicas”, etc.

La agricultura biodinámica está basada en las ideas esotéricas de Rudolf Steiner, el creador de la antroposofía, mezclandola con conceptos de la agricultura orgánica. Uno de los principios básicos de la agricultura biodinámica es el uso de preparados para fertilizar el campo, uno de ellos, llamado Horn manure (500),  consiste en enterrar un cuerno de vaca rellenado con polvo de cuarzo y abono de vaca durante seis meses^[2], para posteriormente utilizarse junto con la composta en diluciones de 1/16 de onza para de siete a diez toneladas de composta. ¿Qué efecto científico tiene utilizar un cuerno de vaca y cuarzo para mejorar los cultivos? Los cuernos de vaca son principalmente queratina; entre los elementos que se han encontrado presentes en cuernos de vaca cabe destacar que el 93% consiste en elementos más ligeros que el magnesio, de los cuales el hidrógeno, oxígeno, carbono y nitrógeno son parte fundamental de la queratina. El resto de elementos presentes en los cuernos de vaca son Al, Si, P, S, Cl, K, Ca, Ti, Mn, Fe, Zn. En cantidades que apenas pueden llegar al 2% de la composición de un cuerno.^[3] Entonces ¿qué tiene un cuerno de vaca que aporte algo de especial a la composta, además de materia orgánica?¿Por qué tiene que ser de vaca?¿Por qué no de cabra, búfalo u otro animal?

Respecto al cuarzo, está compuesto de óxido de silicio SiO?, uno de los compuestos más abundantes en la corteza terrestre. ¿Qué efecto tiene agregar cuarzo a un sedimento que ya cuenta con abundante cuarzo? Ninguno en realidad.

Por otro lado, las concentraciones son ridículas, pues el efecto que tendrían unos cuantos gramos de dichos compuestos ante toneladas de materia orgánica es despreciable.

Respecto al uso de signos zodiacales, alineaciones planetarias y demás, está por demás reconocer que son suposiciones ridículas fuera de toda lógica y explicación científica.

Según afirma la Corporación Demeter, el preparado Horn manure (500)  controla el pH del suelo y fomenta la inmunidad de las plantas, concentrando las fuerzas de la tierra, atrayendo la fuerzas cósmica al mundo material. La biodinámica argumenta que la parte frontal del cuerno está influenciado por el sol y los planetas internos y la parte posterior por la luna y los planetas externos. En resumen, se trata de una mezcla de creencias mágicas y esotéricas.^[4]

Conclusión

Las reuniones y conversaciones que el “experto” trajo a difundir a México tienen principalmente  intereses económicos, pues la asociación Demeter International no ofrece certificaciones gratuitas, ni asesorías gratuitas. Ante la crisis económica y agrícola propiciada por los cambios climáticos globales, es importante tomar medidas fundamentadas en hechos y evidencias científicas, así como evitar la proliferación de técnicas que intentan “hacer un bien” con pseudociencia, a la vez que obtienen remuneraciones económicas.

Articulo por E. Miguel Díaz de León Muñóz en colaboración del equipo de verificiencia.

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Atribución CC BY

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