No es la primera vez que se habla de una posible cura del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), la razón del escepticismo médico al respecto radica en que cuando hablamos de una inmunodeficiencia adquirida, no hablamos de un solo tipo de padecimiento. Los médicos que se basan en la evidencia con disciplinas científicas tales como inmunología, hematología y patología, saben, sin mencionar las capacidades y características del virus, que no sólo existe aquella inmunodeficiencia que se produce por el VIH, sino que hay diferentes entidades que pueden desencadenarla (1).

Sin embargo, las notas de algunos medios de renombre (2, 3, 4) hablaban en sus titulares acerca del VIH y su eliminación por medio del uso de células madre. No obstante, luego de la lectura más a fondo, queda claro que dichos titulares sólo decían una parte de la realidad: si bien sí se usaron células madre, el estudio referido contó con una muestra muy pequeña de pacientes y algo muy importante se omitió:, además del transplante de células madre también se estaba usando la terapéutica que hasta ahora ha funcionado para el manejo del SIDA: los antirretrovirales(5).

La experimentación en humanos y sus aspectos éticos

Lo anterior no debe de sorprender ya que es algo que siempre se contempla en la  experimentación en humanos, un investigador no puede simplemente tomar a un grupo de personas y pedirles si puede experimentar con ellos, sino que es necesario que se use siempre el mejor tratamiento disponible probado; es decir, el investigador debe asegurarse de usar la mejor terapéutica consensada al momento de realizar un experimento en cualquier persona. Esto tiene como objetivo no poner en mayor riesgo la vida de quien se someta a un tratamiento experimental (6).

Bajo este lente, el que una persona use antirretrovirales (el mejor tratamiento probado contra el VIH hasta el momento) mientras se le da otra terapéutica, como la terapia con células madre, no garantiza que ésta última sea la que haya llevado al resultado, sino que hay probabilidad de que dicho resultado sea una mezcla de ambas terapéuticas o que sólo el uso de los antirretrovirales haya sido el causante de la reducción del reservorio de VIH. Pero ¿Qué es el reservorio? ¿Por qué se usan antirretrovirales?

De virus, ADN, ARN, células inmunológicas, hospederos y reservorio

Para comprender por qué no existe una cura aún para el VIH/SIDA, es necesario entender cómo actúa el VIH. Los virus tienen su propio material genético (o sea, su genoma)  el cual puede ser ADN o ARN y que de forma predeterminada tienen la información de los mecanismos que usarán para poder replicarse en el momento que puedan infectar una célula en específico; es decir, los virus utilizan enzimas y proteínas propias y de la célula a la cual infectan (7). El caso del VIH es particularmente especial porque además de invadir a las células del sistema inmunológico, las cuales nos defienden de patógenos como los virus o las bacterias, se trata de un retrovirus, es decir, su genoma se compone de ARN y para replicarse debe convertirse en ADN.

Al igual que todos los virus, el VIH buscará replicarse, pero también puede esconderse dentro del ADN en células del sistema inmune del paciente. A esto se le denomina Reservorio del paciente (8); algo así como una especie de caballo de Troya genético, el cual se resguardará dentro de las células del sistema inmune del paciente mientras espera el momento propicio para replicarse. Lo anterior es relevante porque los antirretrovirales interrumpen alguno de los pasos del ciclo de replicación viral al punto de disminuir sus cifras a niveles tan reducidos que son indetectables. Esto ha permitido que los pacientes con VIH tengan una buena calidad de vida sin complicaciones, una vida prácticamente normal.

En el caso de los pacientes que se reportan en la investigación, estuvieron también bajo un régimen de antirrotrovirales ya que, como se ha mencionado, es la mejor terapéutica hasta ahora, además de recibir el trasplante alogénico, es decir de una donador compatible con genes similares pero no idénticos. Esto nos lleva a mencionar al único paciente hasta ahora que aparentemente ha sido curado del VIH/SIDA: Timothy Brown.

El paciente de Berlín…

Corría 2009 y Timothy Brown, a quien después se le conocería como “el paciente de Berlín”, se sentía cansado, débil, sudoroso y con fiebre. Llevaba 10 años infectado con VIH pero tomaba tratamiento antirretroviral, por lo que su carga viral era prácticamente indetectable aunque el  reservorio seguía en él, latente. Aun así sus números sanguíneos celulares estaban en un número mayor al que uno esperaría en la inmunodeficiencia, excepto que en su caso eran mucho muy altos. Estos síntomas no podían deberse al VIH, tenía que ser otra cosa y en efecto así fue: los análisis de laboratorio permitieron diagnosticar una leucemia (9).

Para tratar este padecimiento, Timothy se sometió a la quimioterapia, entre cuyos efectos secundarios se espera una inmunodeficiencia controlada. Para prevenir efectos adversos, Timothy tuvo que suspender su terapia antirretroviral, por lo que  estuvo propenso a desarrollar inmunodeficiencia por dos mecanismos diferentes: por un lado, como efecto secundario de la quimioterapia y por otro, el VIH no estaba siendo controlado. Sin embargo, Timothy Brown lo soportó y terminó las sesiones de quimioterapia. Para su desgracia (o fortuna, según se vea), la quimioterapia no funcionó y la leucemia reapareció (9).

Fue entonces cuando se pasó al plan B: usar un trasplante de médula ósea. Para ello había que usar radioterapia para eliminar las células en la médula ósea de Brown. Estas células  son las progenitoras de las células sanguíneas , incluyendo a las células del sistema inmunológico. El médico de Brown, el Dr. Hütter, sabía de la existencia de personas que tienen una mutación que hace que algunas proteínas del hospedero  usadas por el VIH para entrar a las células del sistema inmunológico ya no puedan ser reconocidas por el virus, impidiendo así la infección. De esta forma, si se conseguía a un donador con esa mutación y el cuerpo de Timothy no lo rechazaba, se podría erradicar no sólo a la Leucemia sino hasta el mismísimo VIH (9).

Lo anterior no fue fácil, se consiguió a un donador compatible, lo cual es ya de por sí sumamente difícil; y se encontró además que el donador portaba la mutación deseada.

Luego de realizar otros dos trasplantes de médula ósea, siendo necesario el último debido a otra reaparición de la leucemia, con lo que pasó por dos sesiones de radioterapia para matar las células de su médula ósea que aún le quedaban y después trasplantarle una vez más células de la médula ósea del donador que tenía la mutación. Esto supuso un gran riesgo ya que estuvo siempre en riesgo de complicarse con la más mínima infección ya que se tenía que esperar la proliferación de todas las estirpes celulares (9).

Al final, los resultados fueron un éxito: Timothy Brown no sólo se curó de la leucemia, sino que tampoco ha necesitado de antirretrovirales por años y los análisis muestran que no hay expresión de VIH en su sangre, lo que hace pensar que se eliminó el reservorio.

… y por qué a pesar de ello no tenemos una cura:

La historia anterior pone en evidencia que en todo momento Timothy vivió en una situación sumamente especial y que, aunque se tuvieron muchos cuidados, estuvo al borde de la muerte por 4 años, casi se podría decir que corrió con mucha suerte, pero en realidad no fue así, sino que las probabilidades, aunque mínimas, estuvieron a su favor: tuvo un donador compatible, con una mutación sumamente rara, estuvo muy bien controlado previamente con antirretrovirales de vanguardia que son lo mejor para el tratamiento de VIH y siempre se tuvo cuidado de las posibles infecciones en todo momento mediante la administración de antibióticos (9). Reproducir este proceso es de mucho riesgo y sumamente complicado.

En el caso de los pacientes que fueron tratados por los investigadores españoles, lo que no mencionan los artículos periodísticos es que la mayoría no corrió con la misma suerte de Timothy Brown: se sometieron 23 pacientes al estudio y sólo 7 sobrevivieron al procedimiento. Todos recibieron antirretrovirales y los mismos investigadores han indicado que en 5 de 6 pacientes hay una reducción tanto del virus como de las células infectadas(5), pero que la presencia del VIH puede estar enmascarada por el uso de antirretrovirales. Para saber si hay cura hay que quitar a estos y esperar a ver si los números se mantienen como indetectables..

En el estudio original nunca indican que hubo una eliminación del virus, sino que este se encuentra en niveles que se consideran indetectables debido al margen de sensibilidad de las pruebas que se utilizan. Sin embargo, que algo sea indetectable no significa que no se encuentre, por lo que el virus puede aún estar presente en el paciente pero por debajo de dicho margen de sensibilidad.

Aunque con esos niveles es poco probable que puedan contagiar a alguien, lo cierto es que los mismos autores no han indicado siquiera que se haya alcanzado una cura, sino que se requieren más estudios puesto que existen limitantes, tales como el número de participantes: fueron muy pocos y no se pueden proponer conclusiones estadísticamente sólidas con esas cifras. Por lo tanto, no se puede decir que se ha alcanzado, como tal, la cura del VIH/SIDA, aunque este estudio sienta las bases para el diseño de nuevas estrategias que sí lleven a su curación, por lo que no deja de ser un gran avance y de suma importancia.

BIBLIOGRAFÍA

      1. Monserrat Sanz, J; Sánchez Mingo, C;Díaz Martín, D; Sánchez Escribano, J; Reyes Martín, E; Prieto Martín, A; Álvarez-Mon Soto, M. Inmunodeficiencias primarias y Secundarias. Medicine. 2009;10(28):1909-20. Disponible en: https://www.academia.edu/14728029/Inmunodeficiencias_primarias_y_secundarias
      2. https://www.diariopresente.mx/actualidad/eliminan-vih-en-pacientes-enterate-en-que-consiste-el-tratamiento/220251
      3. https://www.eluniversal.com.mx/mundo/celulas-madre-para-tratar-el-vih-el-ultimo-gran-avance-contra-el-virus-que-causa-el-sida
      4. https://www.excelsior.com.mx/global/eliminan-vih-en-6-pacientes-con-trasplantes-de-celulas-madre/1271941
      5. Salgado M, Kwon M, Gálvez C, Badiola J, Nijhuis M, Bandera A, et al. Mechanisms That Contribute to a Profound Reduction of the HIV-1 Reservoir After Allogeneic Stem Cell Transplant. Ann Intern Med. [Epub ahead of print ] doi: 10.7326/M18-0759 http://annals.org/aim/article-abstract/2707334/mechanisms-contribute-profound-reduction-hiv-1-reservoir-after-allogeneic-stem?fbclid=IwAR1mx4pslk8EIlGkMST-TYXQvQkgDMivn8lHFF_jKX9MvaxAzxHjVQ7Rt1k 
      6. Declaración de Helsinki. Disponible en: https://www.wma.net/es/policies-post/declaracion-de-helsinki-de-la-amm-principios-eticos-para-las-investigaciones-medicas-en-seres-humanos/
      7. https://es.wikipedia.org/wiki/Virus
      8. https://www.facebook.com/1808419909463305/videos/335336757036159/UzpfSTE4ODA2MzkyODg5MjYzMTA6MjIxMjM4NDA0NTc1MTgzMQ/
      9. Paz Martínez, Antonio de Jesús. EL paciente de Berlín. Cienciorama. Disponible en: http://www.cienciorama.unam.mx/a/pdf/366_cienciorama.pdf


 Por  Eduardo Fócil Némiga 2018

Atribución CC BY Eduardo Fócil Némiga